Un área de Gestión del Talento verdaderamente estratégica es aquella la que logra conectar a los colaboradores con los resultados de la organización. A mi modo de ver, las limitaciones de RRHH frente a cumplir un rol estratégico son tres:
1. Ausencia de métricas adecuadas. Los KPIs tradicionales en RRHH se relacionan con la efectividad de los procesos internos del área, más no con el impacto de estos dentro de los resultados de la organización.
2. Falta de herramientas adecuadas para medir los aspectos intangibles (personalidad, competencias, bienestar, sentido de propósito, capacidad de liderazgo), que son predictores del éxito en el trabajo.
3. Desconexión entre el diseño organizacional y los procesos de gestión del talento. En este momento circunstancial las organizaciones requieren estructuras flexibles, de bajo control, de alto acceso a la tecnología, a la innovación y al emprendimiento. ¿Qué tanto nuestros procesos de RRHH se alinean con esta nueva necesidad?
Planteo aquí los 6 KPIs que considero son relevantes para este momento:
En definitiva, lo que hará de nuestra área de gestión del talento un área estratégica es nuestra capacidad para establecer métricas que realmente demuestren el impacto de nuestros procesos en el éxito del negocio, que consecuentemente nos permitirá tomar mejores decisiones. Esto, en conjunto con herramientas potentes que nos permitan medir aspectos intangibles y tecnologías de última generación que automaticen nuestros procesos de analítica.